Una visita no tan obligada [Balthazar]

por **Amina Hartwin** Dom Ago 22, 2010 6:07 am

Las cosas se podría decir que marchaban bien en la Tribu, todos parecían conscientes del peligro y actuaban para defenderse cuando era necesario pero le exigían a mi madre una mejor protección, se tenía que llegar a un acuerdo con las otras naciones, era importante que estuviéramos "unidos", parecía que todos tenían esperanzas en la unión tan preciada que había prometido mi madre, aunque a mi me pareciera poco apropiado ir y hablar con otros sobre nuestros problemas internos, la misión estaba dada, mi madre me había mandado a la Nación del Fuego.

El viaje no fue tan tedioso como lo pensé, tuve que usar las molestas ropas de los humanos para poder viajar sin problemas, al llegar al lugar de arribo, cambie mi traje por el típico de la Tribu Agua, lo portaba con un orgullo que no podía describir. Al parecer todos sabían de mi visita, cosa realmente molesta, ¿Nunca podía pasar desapercibida o qué?, como sea, al llegar al Palacio de la familia gobernante, se me abrieron las puertas sin más, nada de introducciones y cosas formales, parecía como si me esperaran, pero yo no me sentía lista para hablar frente al Señor del Fuego, pocas veces lo había visto y no era de mis amigos más cercanos, quizá una ligera distracción me vendría bien, después de todo, un viaje de negocios no es nada sin un poco de... gusto implícito.

Sonreí para mi misma cuando se me hizo pasar a uno de los tantos salones del Palacio, "Disfrute su estancia, Princesa" me dijo un guardia antes de ir por alguien que me recibiera, había instrumentos musicales ahí, lo que sin duda me llamó la atención fue un piano, tenía unos grabados, eran antiguos por lo que se podía ver, pero parecía tan nuevo que era casi irreal, me acerqué sin más al lugar, pasando delicadamente los dedos, podía ver el contraste entre mi piel y la madera negra, siempre me habían gustado los contrastes, eran parte de mi vida y ,quizá, lo que más me gustaba. Aflojé un poco el cuello del traje que llevaba, me sentía ahogar en un clima tan cálido, sabía que se me pasaría en un rato pero no podía dejarlo mientras estaba sola, en el rato en que cuidaba mi arreglo personal, oí la puerta abrirse, estaba de espaldas a ella, solo esperaba que el Señor del Fuego no estuviera ahí, aún no. -Gracias por recibirme- me oí murmurar tranquilamente, con un tono de agradecimiento y respeto aprendido de mi madre, antes de girarme y saludar respetuosamente a quién estaba en la puerta.

por **Balthazar Morgath** Dom Ago 22, 2010 6:40 am

Noticias nuevas y seria algo irónico decir que están calientes aun. La princesa de a Tribu Norte del agua, Amina, venia en una de esas tediosas juntas diplomáticas para la colaboración entre naciones contra la inminente amenaza Paladín, es que no había un nombre mas corto?. Como sea esta noticia me había llegado ayer en la noche, que mas bien fue el ultimo en enterarme, pero eso no le quita que sean buenas noticias, Amina era como mi hermana desde que nos conocimos en su Palacio hace ya algunos años, y me cayo de perlas saber que vendría, creo que le empiezo a tomar gusto a los viajes tan largos por la... no lo repetiré de nuevo. Y bueno esto no era visita de hola como esta que has hecho, así que tenia que usar mi traje de Coronel con medallistas, vale que no eran tantas pero me gustaba de todas formas mi uniforme aunque me quedara muy ajustado, nota mental: Decirle al sastre que haga mi uniforme una talla mas grande.

Ya una vez que me puse mi uniforme que, vaya, creo que perdí peso este verano, ya no me aprieta tanto, Eh, no falsa alarma. Encontré una nota del sastre que decía que ya me había tomado las nuevas medidas. Pero si ni me llamo, debe tener buen ojo. Pues ahora si me sentía cómodo, me puse la gabardina el emblema de Coronel que tanto me gustaba por que me hacia sentir valioso, tal vez no sea el legitimo heredero, pero cuando sea General quedara grabado en los libros de historia que no hubo otro como yo.

Me dirigí al Salón donde la princesa Amina esperaba seguramente a mi Papá, pero que creen?. Me dejo ser el representante de la Nación del Fuego ante Amina, supongo que quiere compensar su error siempre me lo demuestra ahora que miro el pasado, y yo creí que querían mas a mi hermano. Bueno pero..., no mejor no pienso en eso, me pone muy mal ese tema. Así que concetrandome en lo que me correspondía, entre al Salón y vi a Amina admirando el Piano del tatara abuelo de mi tatara abuelo, no se como ese piano a vivido tanto. Me quede parado en la entrada y mire a Amina a los ojos muy fijamente, costumbre mía mirar a si a la gente y por pura formalidad me presente como lo que mi trabajo demandaba.
-Nuestras puertas siempre estarán abiertas para usted Princesa- dije riendo un poco.
Ya que yo no soy así, era una broma que me gustaba hacer cuando nos veíamos en condiciones como esta, Diplomacia y sus... cosas. y como dije, ya dejandose de formalidades me acerque y fui a saludarla como mi amiga con un abrazo y un beso en la mejilla. Y con un gesto de la mano la invite a sentarse frente al Piano.
-Así que... nuestros padres les dejan todo a los hijos, no?. Mira que fácil... quiero uno entonces- dije sonriendo.
Con Amina y su hermana eran de las pocas personas que me veían sonreír sinceramente... de hecho no muchas me veían sonreír si quiera por compromiso.

por **Amina Hartwin** Dom Ago 22, 2010 4:26 pm

Me acerqué unos pasos a Balthazar que por lo que veía había estado encargado de recibirme, me era extraño llamarlo por el título de "Coronel" cuando lo conocía un poco mejor que eso, de hecho mucho mejor. -Gracias, las puertas de nuestro Palacio también están abiertas para ustedes, Coronel- contesté suprimiendo una risa y el "Tzzz" con el que había bromeado con Ciara antes de venir, era divertido tener que hablar con él de esa manera, generalmente habría solo sonreído y me habría mostrado como la educada Princesa que mis padres me habían hecho ser, sin soltar una sola palabra más, pero este no era el caso y me alegraba que no lo fuera. Di unos pasos hacia adelante para saludarlo como mi amigo, se podría decir que lo extrañaba, hacía algún tiempo que no nos veíamos, diplomacia, diplomacia.

Giré sobre mi eje para tomar un espacio frente al piano, estando sentada se veía mucho mejor.- Están ocupados, ya sabes, "Dirigir a la gente es difícil, toma mi lugar"- cité encogiendome de hombros.-Como sea, si es para dejarle mi trabajo, yo también quiero uno o una que se haga cargo- acepté esbozando una sonrisa, acomodando mi cabello hacia atrás, una manía aprendida.-Por cierto, si hacerse cargo es tener tantas medallas como esas... quiero hacerme cargo- bromeé señalando las muchas insignias que llevaba encima, eran lindas a decir verdad, aunque siempre me gustaría más mi vestimenta.

Pasé unos cuantos segundos los dedos por las teclas del piano, formando unas notas bastante conocidas para mí, una canción que hablaba del agua, la había aprendido cuando era pequeña, era irónico estar tocando una canción del agua en un lugar que pertenecía puramente al fuego, pero no me dejaba llevar por eso, después de terminar el primer compás, deje las teclas y le sonreí a mi amigo.-¿Como te ha tratado la vida, Balt? hace mucho que no se de ti- comenté posando mi mirada en él, no había cambiado demasiado, pero las apariencias engañan.

por **Balthazar Morgath** Dom Ago 22, 2010 6:21 pm

Algo que me gustaba de que Amina fuera la representante del la Tribu Norte en nuestro País es que podíamos dejar las formalidades de lado, y hablar como 2 amigos y así los temas de la guerra no serian como: ''Oh por dios hay que hacer algo, mostrar una iniciativa'', se podía ser mas uno mismo, solo que con ropa tradicional, que de hecho me gustaba mas de todas formas. Eso que me había dicho era cierto, mi padre me lo decía muy seguido.
-Pero en parte en bueno. Significa que nuestros padres ya nos creen aptos para tomar decisiones no solo para nosotros si no para toda una nación y su gente- dije con cierto toque de orgullo en eso.
Tener la confianza de tus padres y de una Nación es un sentimiento que no se puede describir, es simplemente Grandioso.

Amina dijo algo sobre mis medallas, a lo cual yo reí ligeramente. Me gustaban, no eran tantas como otros Militares pero yo siempre he dicho que nadie las porta como yo, aunque lo diga yo mismo, pero me si las tengo es por algo.
-Deberías iniciar una carrera Militar... yo lo hice por... bueno tu sabes- dije con cierto deje de anhelo.
Mi sueño frustrado, Ser el Rey de mi País, Amina tenia un hermano mayor que seria el futuro Rey de su Tribu pero esta bien, ella es la hermana menor pero yo soy el supuesto primogénito. Por que será que me atormento solo con eso, he hecho grandes cosas por mi mismo y aun no me siento totalmente completo, creo que jamas aprendí a conformarme, y según mi padre eso era bueno, nunca estar conforme con una nación, hay que siempre querer que sea mas grande, mas maravillosa. Lamentablemente no lo tengo enfocado en ese sentido.

Cambiando el tema, ¿Que ha sido de mi vida?, pues mucho la verdad. Desde la ultima vez que Amina me vio apenas comenzaba a ser maestro Relámpago y ahora, aunque lo diga yo mismo, soy el mejor después de mi padre. Las medallas que tengo no eran tantas como ahora.
-Pues, me convertí por fin en Maestro en Relámpago Control. y debo decir que soy bastante bueno, espero poder llegar a llenar los zapatos de mi padre es ese aspecto- sonreí orgullosamente -Ah!... y estas 4 medallas que ves aquí- señale las ultimas 4, las ponía en orden por fechas -Son por servicios a mi país, estrategias, combate y comando militar-
Después señale la que tenia arriba de todas, era una medalla con el símbolo de nuestra nación.
-Esta es la mas preciada y as importante. El Valor de Fuego- agregue mirando la medalla y despues volte hacia Amina con una sonrisa
-Y tu?... algo nuevo que contar?- pregunte sonriente.

por **Amina Hartwin** Dom Ago 22, 2010 8:14 pm

Acomodé mi traje y la cantimplora que siempre usaba, esa tenía solo agua, el collar atado a mi cuello tenía Agua del estanque de los Espíritus tenía la forma del escudo de la Tribu Agua del Norte, era representativo y había pertenecido a mi abuela por lo que era bastante especial, el atuendo que llevaba fue siendo más cómodo a medida que me acostumbraba, era entallado y no me iba nada mal a lo que había visto en mi último reflejo. Deje las ideas sobre lo que tenía que usar cada quién para concentrarme en lo que decía y además, era cierto.- Es una gran responsabilidad, debo aceptar que no me aterra pero es difícil pensar en las necesidades de todos sin equivocarse, no se como Mamá maneja eso- comenté sinceramente, de todo lo que iba en la "realeza" esa era la única parte que me hacía dudar, ayudar estaba en mi sangre ese no era problema, pero ¿Cómo?.

Me gusto la risa que acompaño a mis palabras sobre las medallas, al menos se podía decir que Balt no era más lo que solía ser antes, eso me hacía sentir bien.Soy mujer, nunca me dejarían, mi lugar es el de mi madre... y hey, no pienses en eso, serás el mejor militar que la Nación del Fuego haya conocido nunca, tu podrás pasar a la historia con mas condecoraciones que nadie-- le animé alzando una mano para acariciar su mejilla, recordando lo que habíamos hablado una vez, no era su culpa y eso nunca lo podría cambiar, simplemente había que ser el mejor en lo posible, en mi caso, con un matriarcado, sería yo la ascendiente al trono, ni siquiera sabía por qué estaba esa regla y muchas veces había deseado que no existiera, diferente a él que siempre lo quiso, pero la suerte estaba dada y había que seguir.

Mi pregunta lo hizo pensar unos momentos, al parecer mucho había sucedido, o no sabía como decirlo.-¿Maestro? ¡eso es genial!, pero recuerdame no sobresaltarme cada que lances uno- le dije con una sonrisa, entre mis amigos era bien conocido que los relámpagos me sobresaltaban desde pequeña, nunca aprendí a perderles el miedo, es decir, la electricidad mezclada con agua no daban un resultado totalmente bueno. Miré con atención cada una de las medallas que señalaba, se notaba que eran importantes para él.- Lo dicho, el mejor militar- repetí sonriendole. -La más importante y la más linda, es asombrosa- observé interesada en el diseño, era elegante pero fuerte, las de nosotros eran diferentes, muy diferentes.

-Pues, quizá algunas cosas, digamos que he encontrado la manera de enseñarle a Cia algunas cosas y estoy buscando por mi misma aprender un arte antiguo, sé que es difícil pero quizá, solo quizá lo logre. Aparte, me han dado el honor de ser la representante de la Tribu del Agua en algunos eventos, es muy... halagador para mí- contesté con una mirada ilusamente iluminada con un brillo especial que solo salía a relucir cuando me daba aires de importancia, es decir, pocas veces en mi vida.

por **Balthazar Morgath** Dom Ago 22, 2010 10:09 pm

No tenia ni que decirlo, es una gran responsabilidad pero sobre todo, honor, el ser representante de tu nación. Ya ambos superábamos la mayoría de edad, éramos adultos y por tal, bueno pues había que comportarse como uno. Pero esta claro que nosotros somos adultos jóvenes, sin embargó a veces yo mismo me amargo mi existencia con mis planeamientos negativos. Es que vamos!... para empezar mi Yin es positivo, agresión, no me va lo negativo.
-Eso es muy cierto, sin embargo lo veo como un gran honor el que nos consideren capaces de hacer esto- comente alegre y sinceramente honrado.
Esto no era trabajo fácil, una mala opinión acabaría con la paz entre las naciones, había siempre que estar de acuerdo. Eso me recuerda a Dimitri, eras simplemente polos opuestos. o mejor dicho iguales por que nos repelemos el uno del otro, y eso era la ventaja que había con Amina, éramos amigos y nos entendíamos a pesar de los diferentes puntos de vista.

Ser mujer no le veía el inconveniente, es que vamos, no estamos en la época de la inquisición donde las mujeres no valían. Incluso aquí en la Nación del fuego ya nos abrimos a las posibilidades y tenemos mujeres militares de muy buen nivel, no me gusta generalizar pero los hombres al superiores físicamente les deja gran terreno a la mujeres para aumentar su intelecto, algunas son grandes estrategas y diplomáticas.
-No creo que eso sea excusa para decir que no puedes ser General, pero es cierto. Tu lugar es el de tu madre- dije sonriendo condescendientemente.
Cerré los ojos un segundo en el momento en que puso su mano en mi rostro, tenia manos de ángel, suaves y tersas, las manos e toda una princesa. Como me gustaría poder decir que mi lugar es el de mi padre.

-Le temes a los relámpagos?- pregunte curioso. -creo que no te he dicho esto nunca, pero cuando comencé mi primer entrenamiento como Maestro rayo, antes de conocerte. Tarde 2 años en siquiera poder controlar mis emociones y dividir las energías positivas y negativas, después de eso, cuando pude invocar un rayo, no fui lo suficientemente calmado para controlarlo y exploto tan pronto salió de mis dedos dejandome ciego por una semana- conte tranquilo -y no fue hasta que te conocí a ti y tus consejos sabios que pude manipular los rayos de otros, y posteriormente manipular los propios- comente sonriente -Creo que te debo las gracias- le agradecí con una sonrisa.
Y pasando de mi, me sorprendió que ella encontrara un arte perdido de su estilo. he leído de todo sobre la tribu agua desde hace varios años cuando conocí a Amina y a Ciara y había cosas que no se como explicar... pero descubrí que los poderes de los maestros agua son increíbles.
-Arte perdido?... me parece haber leído de eso pero no se a que te refieres- explique confundido.

por **Amina Hartwin** Dom Ago 22, 2010 10:50 pm

El pensar en las responsabilidades también me llevaba a pensar en otras cosas, el tener que aprender y sobretodo, estar a la altura de las situaciones, sabía que podía pero aun no entendía como lograrlo, aunque todos dijeran que iba perfectamente, ahhh no me gustaba eso, nublaba el juicio de los demás y sinceramente, no lo necesitaba, se suponía que era una adulta así que tenía que comportarme como tal.

-En eso concuerdo contigo, es un gran honor y sobretodo una buena oportunidad de conocer el mundo- acepté con una sonrisa, la segunda parte era la que más me gustaba, todos sabían por mi fascinación por aprender y conocer más, era como si el espíritu de la Luna me pidiera que lo hiciera.

Me quedé pensando unos momentos sobre el trabajo que estaba sobre nuestros hombros, un paso en falso y terminaríamos con una guerra innecesaria, pocas veces pasaba pues se reservaban las opiniones contra otras naciones, mientras que las criticas hacia los Paladines eran bien aceptadas, sonreí ante un recuerdo de una asamblea dónde se me había permitido ir gracias al puesto de "Asistente de la Reina", todos habían sacado los hechos que se le acriminaban a los Paladines y el líder había terminado muy mal parado, incluso entre los próximos gobernantes y dirigentes militares.

Analicé lo que me decía por un momento, tenía razón, pero no era lo mío.
-Creo que prefiero los juegos de Estrategia, no me gusta estar envuelta en guerras, digamos que solamente no va conmigo, soy un tanto más pacifista que eso- repliqué tranquilamente, yo nunca peleaba a menos de que me dieran una razón y tenía que ser muy buena para que pasara, aparte, no lo necesitaba, siempre había unos molestos guardias dispuestos a hacerlo por mi. Deje reposar un segundo mi mano en su mejilla, me asombraba lo distintos pero tan parecidos que éramos, incluso nuestros elementos eran opuestos, sonreí ante el hecho y después retire mi mano.

-No es que les tema, solo se me hacen tan... incontrolables y vivos que se me hace difícil entenderlos, aparte de que el sonido que hacen hace saltar a cualquiera- dije como si no fuera mucho, aunque me molestaba el no entender.

-No me agradezcas, no sabía que te servirían de algo, solo son... palabras de una chica. Se me hace increíble que no pudieras separar las energías, es decir, siempre te veías tan calmado y con confianza en ti mismo, vale, dime loca pero nunca lo pensé, aparte de que yo solo puedo reconocer la energía que más influye en mí- acepté sin más, era sincera, bueno, sincera como siempre, parecía que nunca podría mentirle a mis amigos, pero ellos tampoco a mí.

-Se le llama Sangre-Control, hace miles de años que no existe una maestra de eso, solo se conoció de chicas que lo lograron, todo lo que se es de un diario en los expedientes del Palacio, al parecer se puede controlar la sangre concentrandose en ella como líquido y no como agua en si, es algo complicado y no se por donde empezar- le dije intentando aclarar sus dudas, hasta ahora lo más parecido era manipular el agua dentro de las plantas, pero esto era mucho más complicado y en realidad, estaba perdida.

por **Balthazar Morgath** Lun Ago 23, 2010 12:02 am

Era cosa de yins entonces, eso creo, a mi me gustaba pelear, exhibir mis habilidades y técnicas. No es que sea arrogante pero si algo me puedo jactar es de que llevo una racha de invicto en el Agni kai, es para que vean que aunque no pueda ser rey soy tan bueno como mi padre y podría ser mejor con el tiempo. Creo que tengo un complejo de inferioridad o mas bien de rechazo, pero es que de veras me gustaba ganar, y a quien no, cierto?. Todos siempre buscamos la victoria. Por que para mi ganar no lo es todo, es lo único que importa. Una exitosa Nación no se forja con perdedores ni mediocres.
-Dime salvaje pero mi lugar es en campo de batalla, claro que antes llevo una estrategia de respaldo pero perderme la acción jamas- dije sonriendo pero muy seriamente.

Es cierto, diganme eso a mi, si yo sabré sobre cosas incontrolables pero una vez que comprendes la belleza del poder de un relámpago es magnifica, es como poesía con 100000 voltios. Yo adoraba el fuego, por que a diferencia de los otros elementos este tiene vida, si nadie tiene la voluntad de mover una piedra, cambiar el rumbo de una cascada o hacer soplar al viento, estos no lo harán. En cambio el fuego se mueve por si mismo, con este elemento es lo contrario, uno debe tener la voluntad no de moverlo, si no de detenerlo.
-No es tan terrible cuando llegas a apreciar su belleza. Solo miralos en el cielo, cuando truenan no hay nada que les impida hacerlo, no hay nada que detenga su luz, su poder. Cuando los escucho rugir es como si dijeran ''Aquí estoy, avanzando y nada me detendrá''.- me puse un tanto poeta y amoral por los relámpagos -Jeje. Creo que solo yo lo veo como poesía de alto voltaje, los demás posiblemente me crean loco, hasta los de mi nación- dije riendo.
Debe ser por el Yin que me cago, ah si claro echale la culpa a una energía ancestral de tus afanes de fuerza y poder Balt, bien por mi.

-Pues si me sirvieron y mas vale que creas lo que te digo. Yo solo me veía calmado por fuera, ya sabes. Como príncipe uno debe estar siempre bien portado, pero por dentro era un tornado de emociones incontroladas, frustración, ira, rechazo, enojo, fracaso, impotencia, cosas que afectaban mi mente mas que mi cuerpo, y por eso mismo el rayo estaba lejos de mi alcance.- dije sin mas con una mueca en los labios.
Y ahora que Amina menciono la sangre control, que demonios era eso?... es... manipular la sangre?. Pero eso seria, no se... no me imagino que clase de poder seria eso, sacarte la sangre, congelarla dentro de uno mismo?... como sea sonaba letal, mas que los relámpagos.
-Wooo. Y dices que los relámpagos son incontrolables?... Eso de la sangre control se oye muy peligroso. Claro que las ventajas para ti serian enormes si creo que eso funciona como estoy pensando.- comente un poco exaltado.
Es decir... vamos eso suena a brujería, matar a una persona desde adentro es muchísimo poder, pero no por eso menos extraño, sin embargo Amina debe tener... no se que es lo que hay que tener en verdad.

por **Amina Hartwin** Lun Ago 23, 2010 9:33 pm

Apreté los labios ante lo que me contestó, no por él, sino por mí y mis juicios, prefería estar detrás que pelear pero es que no podía evitarlo, no era nada fácil entrar a una guerra así como así, sin miedo, cosa que nunca demostraba que tenía pero no me salvaba, al fin y al cabo era como todos.

-Nunca te diría salvaje, solo somos... diferentes, tu prefieres la acción en el campo, yo prefiero otras partes de la guerra pero no me quedo fuera- le dije respondiendo su sonrisa con otra de las mías.

Definitivamente éramos diferentes, él encontraba la belleza en las cosas más complejas, yo podía encontrarla en las cosas más simples, en los arcoiris que las gotas de lluvia formaban en contraste con el sol, incluso en las Auroras Boreales, ahh si, yo era una simple y ya.-Supongo que es tu formación la que te hace pensar así, yo en cambio pienso que los relámpagos son algo inminente, no se pueden detener una vez que son liberados y como el que los usa, hace su voluntad, tu solo los diriges y moldeas- expliqué tranquilamente, entendía su punto y la forma en que lo había explicado era... inusualmente interesante.-Hey, yo nunca te creería loco, si tu fueras loco, yo no sé dónde eso deja a mi hermana- solté sin pensar, en realidad no pensaba decir algo así, ahh vamos, a Cia no le gustaría que le dijera loca, pero bueno, lo era y eso importaba.Al pensar en mi hermana no podía dejar de lado las alusiones al fuego, siendo más divertido cuando necesitabas un café caliente, ahh simplemente no sabía lo que era todo eso.

-Entonces te creeré, aunque debo aceptar que aparentas bastante bien, no lo pensaba de ti, de mi, bueno, es más fácil saber, el espíritu del agua corre por mis venas, soy tan transparente como nadie- bromeé quitandole peso al tema, quizá no comprendiera muchas cosas sobre Balthazar, pero ese tema no era uno que le gustara tocar, su sola expresión me lo hacía notar, quizá no sabría mentir, pero tampoco nadie me mentía, sino fuera así, las lecciones con Ciara y Alexus nunca existirían.

Intenté distraerme un poco del tema, odiaba no saber, de verdad lo hacía, mi sed de conocimiento hacía que lo que no dominaba fuera una frustración, quizá un problema pero tenía formas de olvidarlo, mentalmente repetí una de las canciones que mi nana solía cantarnos, la melodía era tan vieja que no se podía contar cuanto, "Tras el agua, la sangre surgirá y nunca habrá marcha atrás", esa sola línea resonaba en mi mente, solía pensar que era la guerra que se avecinaba, pero ahora me parecía incorrecto.- Es peligroso, mucho, todo lo que he leído dice que si no decides abrir el chakra del fuego, una maestra agua nunca será una maestra sangre, y las ventajas las conozco, pero no es por eso que lo hago- contesté bajando la mirada, no sabía si era lo bastante fuerte para abrir el chakra del fuego en mi, esa mínima parte que calentaba mi cuerpo, se dice que el chakra del fuego se bloquea por la vergüenza y se abre con la voluntad, ¿Tendría yo la voluntad necesaria para aprender y soportar la vergüenza de fallar?, siempre que no podía sentía un nudo en el estómago, odiaba la debilidad en mí.

por **Balthazar Morgath** Lun Ago 23, 2010 11:57 pm

Sonreí cuando dijo que jamas me diría salvaje y tome su mano como símbolo de agradecimiento y la solte al mirarla a los ojos. Era muy amable eso que dijo pero mi espejo decía otra cosa, a los que derrote en mis 7 Agni Kai decían otra cosa y no me molestaba en lo absoluto, significaba que sabían que conmigo no podrían.

Y sobre mi formación, si, creo que era muy cierto, es decir, mirenos, somos muy puestos en casi todo lo que hacemos empezando con los elementos y continuando con las energías Yin y Yang hasta llegar al día y la noche, ambos estábamos en el otro extremo de la situación. Por eso teníamos diferentes puntos de vista sobre lo que nos parece bueno o malo pero eso no impide que tengamos cosas en común pero esos a veces solo llegan a ser trivialidades como preferir un platillo de comida, lo que realmente importa son los pensamientos y las emociones los que conectan a una persona con otra. Y se que tenemos algo en común de eso.
-Es que para mi eso es la belleza de un relámpago, no hay nada mas libre que eso- finalice.
ahora que mencionaba a Ciara y su potencial locura, no entendía por que tenia que ser una típica hermana menor a veces, parece que es un gen que se eles mete a lo menores a cierta edad y les da por hacer lo contrario de lo que se les dice. Es una verdadera suerte que yo me entienda bien con mi hermano y que no sea un loco.
-El primer paso es aceptarlo, Ami... ahora confronta que tu hermana si se le tuercen las ideas a veces- dije riendo inocentemente.
Ok, no es que le diga loca a Ciara pero bueno, ella tiene un... carácter diferente. Un carácter que no la guía por lo que es socialmente aceptado, pero la sociedad no siempre tiene la razón, pero claro, en esta ocasión si.

Levante las cejas, metí mis labios en mi boca apretandolos y asintiendo con la cabeza a su comentario. Mas vale que si lo crea, yo era un trastorno con pies y bueno, lo admito, no estoy totalmente curado. Pero vamos, el que pueda sacar rayos de la punta de mis dedos dice que ya di mas de un paso, quizás tres saltos. Y creo que aun no conoce ten bien como pensé a Amina, yo no la veía tan transparente, supongo que es por que no vivo con ella todos los días y no se como se porta, pero se que eso cambiara algún día, digamos que en esto ya llevo un salto dado.
-Te digo algo?... yo no te veo tan transparente. Para mi... tu tienes tu lado complejo y misterioso- dije casi susurrando
La mire fijamente como si buscara su transparencia en sus ojos pero nunca fui bueno en las para juzgar personas con solo mirarlas, defecto de empatía.

Así que, chakra de fuego... por ahí escuche que me hablaban. El Chakra de fuego se guía por la voluntad y como he dicho, un Maestro fuego no debe tener la intención de mover las llamas, si no la VOLUNTAD de detenerlas. En pocas palabras los maestros fuego de gran nivel y con un buen auto control somos expertos en el uso de la voluntad. Explicando como funciona nuestro poder, no se trata de quien pueda generar mas fuego, fuego crece solo, se trata de ver quien puede MANIPULAR mas cantidad de fuego, ser capaces de impedir que crezca e infundir nuestra voluntad en las llamas para que se detengas y avancen a donde queremos que lo hagan. Es una teoría simple pero verdadera.
-Oye eso esta perfecto, si es así yo podría enseñarte e abrir tu Chakra de fuego. Ese es el chakra de la voluntad, por lo que tiene sentido que se necesite para usar sangre control. Si puedes mover la sangre como el agua le quitarías su movilidad a una persona y junto con eso su voluntad ya que se movería a donde tu le ordenaras. Si es como lo imagino, tiene el mismo principio que el fuego control, debes meterle tu voluntad a las llamas para que no crezcan si no se lo ordenas.- dije con palabra de aliento para Ciara.
Era curioso como al ser tan diferentes nuestros elementos se complementaban igualmente. Nosotros usamos técnicas de los Maestros Agua para hacer fluir la energía interna y así podemos re-direccionar Relámpagos, mientras que ellos necesitan una voluntad de Maestro fuego para controlar la sangre.
-Sabes... es curioso como aun siendo elementos opuestos se complementan tanto. Me hace pensar que todo somos parte de un mismo ser llamado planeta. Es decir, nosotros necesitamos la fluidez de un maestro agua para desviar relámpagos por nuestro cuerpo y ustedes necesitan una voluntad de maestro fuego para controlar la sangre. Eso es como casi como una simbiosis- explique con un toque filosófico.

por **Amina Hartwin** Mar Ago 24, 2010 9:33 pm

Tomé su mano por unos momentos, estrechándola, en comparación el tenía unas manos mucho más fuertes que las mías, nunca había entendido a que se debía eso, quizá las prácticas son más duras o las exigencias más altas, nadie sabía pero eso era lo que saltaba a la vista, esbocé una sonrisa incluso sin pensarlo, no entendía esa parte de mí que sonreía ante el más mínimo detalle.

Me mordí el labio cuando termino con la belleza de los relámpagos, lo aceptaba, eran asombrosos pero yo no le encontraba más, era como si no estuviera concentrada lo suficiente en eso y la verdad, si quería encontrar más, solo no sabía cómo… de nuevo. –No sabes cómo me gustaría encontrarle esa belleza extra a alguna cosa que no se relacionara con el agua- murmuré sinceramente con una ligera sonrisa.

Quizá fuera lo bastante ciega para no ver cosas extraordinarias, pero tenía excelente vista para otras cosas, incluso para encontrar fallas en algo, parecía que me gritaran “encuéntrame”, eso era lo que me hacía atrapar a mi hermana, aunque cada vez se hiciera más difícil -Hey, no le digas a Ciara que dije eso o me mata, de por sí quiere hacerme polvo cada que tengo una nueva lección- le confié riendo junto con él ante el recuerdo de mi hermana la no tan normal princesa Agua que cada que podía se escapaba por las noches, ¿Creía que no me daba cuenta o qué?, estaba bien que detalles se me escaparan, pero una puerta cerrarse a la una todos los días, no era fácil de olvidar.

Alcé la vista cuando comenzó a hablar de nuevo, tenía una manía con él, con los demás me distraía constantemente y parecía que no podía atención pero con él en particular había visto que no estaba volteando y bueno, haciendo nada.-Me alegra saber que al menos alguien piensa eso de mí, comenzaba a olvidarlo yo misma, parece que no se me da recordarme cosas a mi misma- contesté en un murmuro trabando mi mirada con la suya.

Sentí el paso del tiempo solo por los latidos un poco más rápidos y acompasados de mi corazón, si pensaba en él podía concentrarme en lo que hacía, el vital trabajo de mover la sangre, definitivamente de ahí no venía ningún sentimiento, pero siempre lo relacionábamos con eso, ¿Sería por que late más rápido a veces?, sonreí ante mi línea de pensamiento y después puse atención a algo más importante que el tiempo.

-¿De verdad lo harías por mí? Es decir, ¿No te importaría?- pregunté esperanzada, vamos, no muchos saben cómo hacer el trabajo y Balt era alguien en quién podía confiar. –A lo que escucho, tu sabes más de la sangre control de lo que dices- bromeé, estaba entendiendo el concepto en tan poco tiempo, a mi me había llevado unos días el solo proceso de entender que se podía hacer.

Siempre había pensado que nos compensábamos, es decir, como una persona, tiene diferentes chakras pero estos forman un todo, así eran los elementos y los maestros, simplemente eran parte de un todo.-Definitivamente es algo así, de hecho yo misma lo había pensado, todos nos necesitamos alguna vez aunque no lo aceptemos, eso es lo que deberían implementar, estar todos a la ayuda de alguien más pues no sabes cuándo lo necesitarás.- acepté cayendo sin querer en la razón por la que me habían enviado, buscar soluciones, si eso, no era para nada que yo quisiera viajar a la Nación del Fuego, pfff nadie me creería.

por **Balthazar Morgath** Mar Ago 24, 2010 10:51 pm

Para mi sonaba lógico que no el encontrara belleza a algo que no tuviera relación con el agua, es decir, ellos viven totalmente rodeados de agua, seria realmente extraño voltear y ver algo diferente. Todo lo que ella conoce son estructuras de hielo formadas por maestros agua que les dieron formas y diseños a la paredes. Para mi es como todas las culturas, cada una tiene un estilo diferente sobre lo que consideran hermoso, para el agua es muy tranquila, aunque conozco sus virtudes también veo sus defectos como en cualquier otro elemento, en si ninguno es mas fuerte que otro por que forman un balance en el mundo, si un elemento es mas fuerte que otro el mundo estaría en desproporción.
-No es tan difícil, solo mira mas alla de lo que su primera impresión te da, mas alla de su forma física. Es buscarle un lado diferente al que te muestran las cosas y ver su esencia- dije con una leve sonrisa cordial.

Y vale, lo ultimo que quiero es que haya una guerra de hermanas, eso para mi... bueno es que si me imagino a mi y a mi hermano peleando contra el otro seria algo terrible. Reí alegre y un tanto bromeante por las preocupaciones de Amina, era claro que yo no hablaría.
-Por mi ni te fijes que no diré nada. Soy una tumba- respondí haciendo un gesto con las manos como si sellara mi boca y tirara la llave al olvido.
Aunque no creo que si se entere Ciara se enoje, además dudo mucho que sea mejor Maestra Agua que Amina, para empezar... si mis calculo no fallan Ciara aun no es Maestra, creo que es muy joven aun para ese titulo. Y me parece bien que los jóvenes no se les de el titulo de Maestro a tan corta edad así sepan usar su elemento como expertos, es mucha responsabilidad para algunos.

Podía sentir algo diferente en la mirada de Amina, era casi como si algo me iluminara, un sentimiento indescriptible para mis palabras. Sonreí amistosamente y acaricie su mejilla con mi mano simplemente rozándola, como si no quisiera que se rompiera o algo asi. Vaya, creo que estaba siendo muy meloso, bueno es que no la he visto en varios años y ya la extrañaba, era extrañamente encantador tenerla cerca. No se si seria redundante decir que cuando la mira es como si me mojara de su carisma y encanto, ella tenia ese no se que que la distinguía de las demas chicas que conozco.
-Sabes que no podría decir algo malo de ti,.... siendo honestos si podría, pero solo cuando te vea en mal camino- sonreí sin dejar de mirarla.
Quite mi mano de su mejilla, no quería que pensara que la quiero tocar y no se que mas o que le estoy coqueteando... No no no no... No se por que soy asi, tanto trabajo seria decirle que se me hace hermosa?. Argghhh soy un lío emocional aun, después de tanto meditar, como me choca que me queden secuelas. Es que no le estoy pidiendo matrimonio o que sea mi novia, solo le quiero decir que es hermosa, aunque... ser, no Ah espera. Mi compromiso es con mi Patria primero. Ella esta aquí por asuntos diplomáticos no por mi.

Era mejor dejarse ideas raras. Me enfoque en lo de la sangre control para no mostrar señas de que mi mente andaba algo confundida, necesitaba enfocarme en algo rápido y que mejor que darle apoyo a Amina.
-No claro que no. Es mas o hago con gusto... tu necesitas un experto en el chakra del fuego y quien mejor que un Maestro Fuego y además tu amigo?- respondí con una enorme sonrisa.
-Tu solo di cuando quieres empezar y de inmediato salimos, Lo primero sera abrir tu chakra y después algo de Fuego Control básico para que liberes tu poder con el Yin positivo- ofrecí emocionado.
No seria mucho problema para mi enseñarle eso, con mi habilidad para dominar el rayo control se me es mas fácil eso de las energías y los Yins.
-Incluso si no termino de enseñarte las bases del entrenamiento podría ir al polo Norte a terminar.- Comente con una sonrisa de ''no me molestaría''.

por **Amina Hartwin** Mar Ago 24, 2010 11:52 pm

Hablar de belleza me llevaba a pensar en nuestro Palacio, a mis ojos era realmente bello, incluso más que todos los otros, no podía decirlo en alto por no causar revuelo, pero era mi sentir y eso no lo podía cambiar ni aunque quisiera. Eso era algo que había aprendido a lo largo del tiempo, los sentimientos no son voluntad de una persona, solo están ahí, como el balance entre los elementos, aunque muchos pensaran que sus elementos eran los más fuertes, todos teníamos debilidades y virtudes.

-Prometo que intentaré hacerlo, comenzando por lo que me rodea, pero si eso me hace pensar muy seguido en ti, será tu culpa, no perderé solo por no concentrarme- amenacé con una burla implicada en la voz, definitivamente si implicaba otra manera de ver el mundo, no podía descuidar lo que ya conocía, no sabía si el título de Maestro podía ser retirado, pero no quería averiguarlo.

Me uní a las risas de Balt, tenía una risa contagiosa aunque posiblemente no lo creyera, tendía a desvirtuarse el mismo, cosa que a mí me parecía mal, yo encontraba muchas cosas buenas en él, así como en todos.- Vale, confío en ti- le dije con una sonrisa sincera, realmente lo pensaba así. Las virtudes de todos eran algo que me gustaba ver y analizar, incluso en mis enemigos [si los conociera] así podía encontrar lo necesario para devolver el ataque, yo nunca era la primera atacante, era como una de mis reglas personales, para mí ser la primera en atacar era símbolo de que no respetaba mi elemento, la paz era parte de él.

Hablando de paz, aquí me sentía muy bien, su compañía era tranquilizadora aunque se oyera extraño, éramos opuestos por naturaleza y aun así eso no me molestaba, ahh si debería dejar de pensar de manera tan rara, vamos, pensar así no era común, incluso en mi casa era algo loca.

Cerré los ojos en cuanto acaricio mi mejilla, esbozando una sonrisa, ese simple gesto me había hecho sentir mejor, definitivamente era bueno estar con él de vuelta, estos años lo había extrañado, no tenía con quién practicar sin tener que gritar y estresarme, era fácil y cómodo pasar tiempo con él, aparte de muy divertido.- Por favor, no dudes en decirme si hago algo mal, odio que escondan mis errores, no soy mejor ni peor que nadie, tengo errores y lo reconozco- murmuré quedamente, esa era parte de mi filosofía de vida, nunca dejaba que el título se me subiera a la cabeza, el ego no ayudaba para resolver nada y mucho menos para pedir cosas, como el pequeño favor que tuve que pedir para que me dejaran venir, vamos, no era solamente que quisiera hablar de negocios, ni que fuera mi padre.

-Muchas gracias, Balthazar, no sabes cuánto lo aprecio, pero no le digas a nadie que te lo he pedido, nadie sabe que quiero aprender esto, técnicamente eres el primero al que en realidad le he podido decir- confesé con una sonrisa algo culpable, no podía creer que no le tenía la confianza necesaria a alguien más para explicarle algo que estaba totalmente perdido en primer lugar.-Por mí, cuando tu digas estará bien, tengo unos días aquí, he pedido un poco más de tiempo- le dije con unos ojos algo brillantes, la ilusión era algo que no siempre tenía.
-Será un honor tenerlo por allá, Coronel Tzzz- acepté con la voz de toda princesa, esperen esperen, ¿Qué había dicho?, no podía haber soltado EL apodo, ¿Verdad que no? , ay no, esto estaba perdido, alguien se las vería conmigo cuando volviera.

por **Balthazar Morgath** Miér Ago 25, 2010 3:09 pm

Puse cara de esta falsamente ofendido y solté una ligera risa cuando me quería echar la culpa incluso antes de que le pasen las cosas. Normalmente no ponía esta cara o reacción para bromear, generalmente mi humor era mas... vaya, que ironía, generalmente yo era mas frío y habría replicado que la culpa sería de ella, pero amina no es cualquier persona y por eso ella logra sacar mi lado cálido... que no quema.
-ahh... o sea, claro, ahora yo soy el de la culpa no?- respondí.
Yo sabia que no era asi, solo me gustaba hacer ''pelota'' con ella.
Era bueno saber que confiaba en mi, no mucha gente lo hace, normalmente en el que confían es en mi hermano por obvias razones pero tener a una persona es un progreso. Me alegró oír eso y no pude evitar darla una mirada de agradecimiento acompañada de una leve sonrisa, se sentía bien que te dijeran eso aun cuando yo le pedí que lo hiciera.

Amina tenia una hermosa sonrisa, sinceramente no había puesto tanta atención pero ahora que estamos tan cerca pude notarla, lo que digo es que siempre que la veía sonreír se veía hermosa, pero ahora, no se, de repente son sentimientos que salen y que no sabias que tenias pero igual disfrutas. Y pasando a un plano mas abstracto y objetivo, Claro! que le diría sus errores, no por ser arrogante sino por que no me gusta ver a nadie en la mediocridad.
-Eso no pasara, créeme que soy de las personas que siempre notan y dicen los errores. No es sabio dejar a alguien hundirse en la mediocridad, pero...- hice una pausa y fruncí el ceño mientras pensaba lo que diría.
-...Lo siento es que iba a decir que lo harás bien pero soy honesto y se que al principio lo harás mal, si los Avatares tiene problemas aprendiendo un Control opuesto al suyo nosotros no somos la excepción. Pero eso no dice que no vayas a ser una buena alumna- rectifique.
No quería desalentarla pero mentirle seria peor aun ya que si dijera algo como ''seras la mejor'' y al principio va mal, se desanimaría mucho por que le dije que seria estupenda y paso lo contrario, era mejor hablar con la verdad, decirle que no sera fácil y asi estaría con los pies en la tierra y al tanto de que los errores son cometidos y en este particular caso aceptados.

-Ni lo menciones, de verdad es un placer... y... bueno, te agradezco que me tengas esa confianza, realmente lo agradezco- dije sonriendo tiernamente.
Que confiara a si en mi me hacia apreciarla mas, mucho en realidad. Me acerque a ella y le di un cálido abrazo como muestra de que si estaba completamente agradecido de sus palabras. Ella era de esas amigas como pocas encuentras, hermosa, amigable, tierna... Balth?... que estas diciendo dios mio? parece que le regalarías las estrellas si le sigues halagando aunque sea en pensamientos. Despeje mi mente o mas bien fue que me quede en blanco con su mirada que parecía brillar hacia mi, era hermosa. Y ya hablando seriamente del entrenamiento pues por mi podríamos empezar después de comer, asi rendiría mas en mis practicas, ya saben por eso de que el estomago, si esta lleno hay energía y no se que mas.

Volviendo a la realidad... WHAT?. Ok que fue eso que dijo, Coronel Tzzz? Tzzz de...Tzzz como caliente? bueno si era caliente, duh!, mi elemento es el fuego o... nah, no podría significar otra cosa. Ante su comentario solo pude poner una extraña cara u jamas había usado tan notoriamente como ahora, es que no sabia que fue eso. Fruncí el ceño y levanta las cejas al mismo tiempo con una mirada de confusión y en mis labios una ligera sonrisa graciosa que no sabia si era por nervios o por simple risa, es que no me esperaba que me pusieran apodos en la Tribu agua. Al menos no fue Coronel chamuscado.
-Coronel... Tzzz?...- hice enfasis en el Tzzzz.
-...Y eso?, es asi como se dicen en la Tribu Agua?, ojala no sea una burla que no entiendo- dije aun con la misma cara de sorpresa.

por **Amina Hartwin** Miér Ago 25, 2010 10:37 pm

Obvié una sonrisa cuando contesto con ese tono, era tan divertido verlo en ese plan, si mal no recordaba, antes no era así, al menos no la primera vez que lo vi, después de eso había admitido con Dominic que me daba algo de miedo su seriedad, pero ahora, viéndolo así no podía ni recordar por qué se me había ocurrido eso, definitivamente estaba mal, como muchas otras veces.

-Técnicamente, si, lo serás- seguí bromeando formulando muecas de asentimiento, era una mentira pero piadosa, de esas que solo divierten. Me encogí de hombros divertida cuando me miro agradecido, ¿Si era así no?,¿Lo había interpretado bien?, sabía que muchas veces fallaba en la interpretación pero esta vez algo me decía que estaba bien, no era fácil saberlo pero, ahh de nada sirve que le de vueltas al asunto, simplemente lo se y no hay más.

Las interpretaciones me habían llevado a entender a mi hermana, digamos que era así como lograba entender su "mundo", la manera en que cree saberlo todo pero aun así cuando sabe que no, se forza a aprender, solamente si le conviene, claro, pero esos eran asuntos menores, al menos no habíamos creado una guerra en la Tribu ni levantábamos rumores nunca, aunque dentro del Palacio, bueno, eso era otra cosa que no tenía caso mencionar o perdería el hilo.

Después de perderme un rato en mis pensamientos, giré mi vista para verlo y escuchar lo que tenía que decir, conocía su código de honestidad, solo esperaba que lo utilizara bien.-¿Sabes? Para muchos eso pudo oirse desalentador, pero como no soy muchos, eso sonó perfecto para mí, no pienso que pueda ser rápido aprender, es decir, ni siquiera soy Avatar ni nada, estoy haciendo esto aparte así que intentaré dar lo mejor de mí pero tampoco te burles si soy un desastre- contesté con una sonrisa amplia y sincera, nadie me había dado un inicio así, pero todos los que no lo hicieron terminaron con una Amina molesta y totalmente indispuesta, no me gustaba recordar mis años de Aprendiz, al menos no los primeros, exasperaba a todo el que quisiera enseñarme por que yo no quería, después fui agarrando el gusto, ni siquiera se cuando complete mis 12 años, mi estilo al inicio era puramente un desastre.

-Cuando quieras, lo digo enserio, eres de las pocas personas en las que se que no me van a fallar, debería ser yo la que agradezca, no se encuentran muchos amigos así- acepté regresando una sonrisa a cambio, lo había dicho, con él sonreía sin razón, al final del día tendría un dolor o algo.

Me acomodé en sus brazos durante un rato, me encantaban ese tipo de gestos, aunque no de todos los aceptara, no podía ni quería, a decir verdad muchas veces me había sorprendido a mi misma pensando en el Príncipe de Fuego, pero siempre ocultaba mi cara de pensamiento con otra mueca, a nadie le aceptaba que en realidad extrañaba mucho más a Balth de lo que decía, siempre que mencionaban las Asambleas tenía la manía de poner un poco más de atención, generalmente solo dejaba pasar las pláticas pero en esos casos eran especiales, por eso esta vez decidí venir yo misma en vez de mi mamá que seguro también podría haber venido.

Cuando menos me di cuenta mis pensamientos me llevaron a esas platicas de nuevo con mi hermana, después de cada Asamblea solía contarle lo que sucedía, y por supuesto, los asistentes siempre estaban presentes en esa platica, recordé exactamente la vez donde el "gran" apodo había salido, le había contado a mi hermana de Balthazar, unas cosas que no estoy dispuesta a mencionar, entre las dos concluimos en un "Tzzz" que ahora me había mandado a la ruina.

-Lo siento, de verdad, puedes estar seguro que no es una burla, es como una... distinción- intenté arreglar mordiendome el labio algo culpable, tenía que dejar de recordar ese apodo a la de ya. -Cuenta con que nadie más te dice así, lo siento mucho, Balthazar, fue una tontería- agregué pensando en que el "Tzzz" en sus labios no quedaba tan bien, era para mujeres, definitivamente.

por **Balthazar Morgath** Jue Ago 26, 2010 12:21 am

-Pues si tu lo dices...- respondí sonriendo como niño travieso, algo raro en mi.
Con una mueca de aceptación y casi cínica, me encogí en hombro y le di la razón de que por mi culpa la distraería, era mas divertido ahora que lo pienso mejor. Me la imagino muy concentrada y de repente ve la belleza de lo que la roda y me recuerda.. BAM! por ahí a alguien le cae una laguna en la cabeza cuando use su agua control.

No se que hora era pero el tiempo no asa en vano, eso es seguro, aun asi creo que la hora de la comida ya venia y nosotros en vez de tratar los temas de nuestros países y la guerra, estábamos poniéndonos al día con nuestras vidas. Pero bueno no es tan grave, ella estará por un par de días mas asi que todo esta resuelto no?. que tanto nos llevaría acordar lo que tengamos que acordar, apuesto que lo haremos en un tercio del tiempo que se toman los viejos en sus asambleas. Curiosamente cuando estoy en esas asambleas no sonrió como ahora, definitivamente prefiero tratar con Amina. Era mas bonita que el Rey Tierra.. jajaja, no, era broma, ella es hermosa. Pfff otra vez con eso, rggg de veras que a veces me quedo muy clavado con algo y no me lo saco de la cabeza.

Respecto a lo que dijo, era un alivio saber que ella aceptaba las criticas constructivas a diferencia de ''muchos'' que se enfadan cuando les dices que su flamita es mas pequeña que la de un mechero. Ok, se que es molesto que lo digan y también es molesto la forma en que lo dicen algunos pero asi como ella no es muchos yo tampoco soy algunos, podre ser don seriedad pero ella es una excepción, una linda excepción además de que como un símbolo de autoridad en mi país no me rebajo a ser grosero... no esperen,... amo a mi pueblo pero si, si es verdad a veces me porto como un engendro del demonio pero es que esas personas se lo buscan, con decir que soy tan serio que a veces no hablo, entienden mi punto?... significa que no hablo mucho y si no ofendo por que no digo nada malo a menos que lo amerite y busco una forma buena de decirlo sin esconder la verdad, pero como dije, si eres un malnacido yo soy nacido malo, no, que dije?. bueno cuando lo dije sonaba con sentido.
-No, yo no me burlaría de ti, te diría que estas mal pero no me burlaría. Además a ti te tengo una paciencia especial que con los demas no y es cierto- dije con una cálida sonrisa.
Era muy cierto, creo que ella me gustaba, y por esa misma razón, no se... todo lo que hace y dice suena lindo. Me siento patético, jamas pensé que llegar a pesar a si.. tan meloso y sin uso de razón, a veces me siento perdido en sus ojos y ni como salir. Pero cuando lo hago es como un madrazo de realidad que me dice ''regresa bruto''.
Pero hablando de que todo lo que dice se oye lindo... no todo, el ''Tzzz'' sonó mas que nada gracioso. Lindo, si, pero sobre todo gracioso.
Ahora quería saber a que veía el ''Tzzz'' y según ella no era algo malo y que solo ella lo decía, aun asi no tengo concreto ese termino, pero lo relaciono con el calor, sera una broma que con su hermana de mi?.

-No te preocupes, si dices que nadie mas lo usa te creo... pero...- me quede un momento muy pensativo.
Tanto que mi expresión cambio a una de pensador, hasta me rasque la barbilla mientras me mordía el labio intentando hallar una explicación es que no venia nada, si, por que ella me tenia en blanco, cada vez que la miraba era peor pero no podía dejar de verla. Levante mi mirada cuando me di cuanta de que empezaba divagar con ruiditos al intentar pensar. Ahora pensara que se me hacen lapsos en los que me desconecto del mundo, aunque era cierto, me ponía a pensar en mis cosas y asuntos muy seguido y de repente ya no habitaba este planeta, era algo frecuente si no tenia en que enfocarme pero por suerte Amina esta aquí.
-...A que viene el ''Tzzz''. O sea que es... para ti que significa y no es tontería, ahora ya me picaste y me dices o... o te pico la panza- amenace con broma.
Y bueno... lo dicho, el cerebro se me fue de vacaciones con eso de tener a Amina cerca de mi, es que... joder, como dije que le picaría la panza, fue muy obvio que lo dije por querer tocarla o no se, una caricia disimulada. No se que me pasaba la verdad pero me daban ganas de abrazarla otra vez. Que puedo decir, ella es abrazarle.

por **Amina Hartwin** Vie Ago 27, 2010 12:37 am

-Si yo lo digo, es cierto- finalicé esbozando una sonrisa divertida de esas que no me preocupaba por darle a los demás.

Fingí estar pensando mientras lo veía, bueno, no técnicamente fingir por que eso me salía horrible, solamente lo que hacía era pensar en lo que sucedería si yo perdiera el control en una batalla, seguramente terminaría como perro mojado, con los cabellos pegados al cuerpo y las ropas igual y con el frío que hacía allá, no quería ni pensar quedar así. El pensamiento del frío me recordó que en este lugar hacía bastante calor, con un suave movimiento quité el saco que llevaba puesto, debajo tenía el traje del agua que me gustaba mucho más y los sastres tenia que reconocer que habían hecho un buen trabajo, estaba justo a la medida.

Cuando me moví pude notar la hora en el reloj de la pared contraria, comenzaba a sentirme algo... sin poder, eso definitivamente decía que era la hora de la comida, a esta hora es cuando mi fuerza falla y seguramente la de los Maestros Fuego es mejor, sonreí ante la realización de que cuando yo era más débil, Balth era más fuerte y al contrario. Intentaba encontrar una hora del día en la que los dos fuéramos iguales pero no encontraba alguna, quizá en el ocaso, pero no estaba segura aparte de que ni quien quiera pelearse con él, con el historial que conozco, no me dan ganas de pelear.

Sonreí para mi ante la línea de pensamiento que llevaba, pensaba en no pelear con él cuando estaba segura que nunca lo haría, es decir, a menos que fuera obligatorio, estaba segura que Balthazar y yo nunca pelearíamos, casi siempre estábamos en el mismo bando, en cualquier situación, excepto cuando llevaba el uniforme y la máscara de seriedad para los asuntos difíciles lo que no era malo, demostraba lo multifacetico que era, sabía adaptarse a diferentes situaciones, era muy bueno en eso y en otras cosas en las que no quería pensar, no quería comenzar con todo el lío de nuevo, de por sí mi mente ya era un desastre caminante.

-Es bueno saber eso, te lo recordaré cuando una risa se te quiera escapar- acepté con una sonrisa obstinada- Muchas gracias, Balth, de verdad, me alegra que vayas a ser mi maestro, al menos obtengo paciencia- comenté aún sonriendo como si me pagaran por ello, simplemente no podía obligar a mi boca a permanecer en una línea, al parecer inconscientemente intentaba verme mejor cuando estaba tan cerca de él, pocas veces había pasado, siempre había gente alrededor, y cuando había gente tenía que comportarme como "Amina, la Princesa A gua", ahora estando un poco más a solas [por que dicen que las paredes escuchan] podía ser más yo que nunca, aunque tenía que aceptar que muchas veces me gustaba estar rodeada de gente, la vida era más divertida si tenías a alguien con quién compartirla, pero ahora solo me apetecía pasar un buen tiempo con él, raro pero cierto.

-Que bien que me creas...- estuve por decir cuando oí que el pronuncio el conocido "pero", y aquí empezaba lo malo, que él pensara me dejaría en una mala situación, ¿Qué le diría? simplemente no podía aceptar la verdadera razón, era como... no, ni pensarlo solo no podía y ya. Estaba un poco ausente, pensando en las posibles soluciones mientras lo observaba con la mirada perdida, él tenía la manía de morderse los labios, otra cosa más que compartir, ahh claro, si tuvieramos que, obviamente, pfff Amina, deja de pensar en eso y concentrate o no habrá más, fueron sus ruidos lo que me llevaron de vuelta a la realidad, a la cruda realidad.
-¿Yo?¿Picarte? pfff estas mintiendo, yo no haría nada por picarte con algo y si tu me picas la panza, yo me encargo de que no salgas ileso- dije nerviosamente con una sonrisa y unas mejillas un tanto rosadas, aunque secretamente sabía que eso no me molestaría, era como si, no, no Amina, simplemente no, intentaba alejar esos pensamientos mientras pensaba en una buena respuesta, no podía decirle ¿Alguna vez te han dicho que estas que ardes? obviamente no podía, ni siquiera sabía como decirlo sin sentirme mal, ahh en la que me había metido.-Bueno, pues "Tzzz" significa...significa...bueno, obviamente es alusión al Fuego y a la temperatura, como cuando una flama se apaga ante el agua- intenté explicar medio mintiendo y medio diciendo la verdad, era horrible en esto, si fuera yo, no me hubiera creído nada. La temperatura exactamente no era en grados pero bueno, no importaba ahora, había salido y ya.

por **Balthazar Morgath** Vie Ago 27, 2010 6:15 pm

El sol estaba en su apogeo por lo que podía sentir, mi poder estaba aumentando asi que era la hora en la que Amina era mas débil, como yo en la noche en donde mi fuerza menguaba pero tenia mis métodos para poder llevar el ritmo de la batalla. La respiración, es la base del poder de un maestro fuego y con una buena dominación de esta podía no verme tan débil en la noche pero si mas lento debido a que necesitaba mas oxigeno para que mis llamas sean fuertes. Hablando de eso, esta hora era en la que nos fortalecíamos por que hacia mas calor, cosa que Amina parecía sentir y se quito su saco, era obvio que ella estaba acostumbrada al clima helado del polo norte a comparación del cálido y a veces caluroso clima del mi nación. Pero... tzzz, se veía mejor sin tanta ropa y apuesto que se vería mejor... no, rrrrggg que mente tan sucia. Me concentre en mejor en otra cosa que pensar, como divagar la mirada por mi palacio y verla a ella de paso.

Ahora que lo veía, mi palacio era bonito, me gustaba su arquitectura antigua, de hecho me gustaba las cosas antiguas por eso fue que en mis entrenamientos cuando era aprendiz de fuego me decidí por aprender el estilo de los Guerreros del Sol mas que el estilo propio de mi Nación nada mejor que aprender de tus orígenes. Ahí estaba yo leyendo interminables pergaminos de las leyendas de los primeros maestros fuego, aprendiendo también no solo sus modos de Fuego control si no su cultura y afortunadamente el maestro que me enseño era un grandioso Guerrero del Sol, cultura que se creía muerta hace unos 3 mil años que curiosamente después de la famosa guerra de mi país por conquistar el Mundo, el Señor del fuego Zuko les permitió incorporarse a la modernidad ya que cuenta la historia, los Guerreros del sol se ocultaron de nosotros por la deformación del Fuego control, pero una vez que la paz reinó y el fuego control no fue usado simplemente para la destrucción, nos volvimos una nación completa.

-Sera un honor ser su maestro princesa- dije poniéndome de pie con una reverencia.
Obviamente era de broma, pero eso no significa que no la respete sino que era un juego de nosotros hacer burla de que somos príncipes cuando en realidad nos vemos como amigos, muy buenos amigos. Y con respecto a lo que le enseñaría, suponía que el que yo sea mas Guerrero del sol que Maestro fuego normal, iba a ser una ventaja mayor ya que no veo el fuego como poder puro, sino vida, fue gracias a los guerreros del sol que le puedo hallar la belleza a las cosas que otros consideran peligrosas, por eso mismo el relámpago lo veo como símbolo de libertad y movimiento. Le ser amas fácil a ella entenderme asi, o eso espero.

Ya lo había notado peor no me canso de pensarlo, tiene una sonrisa hermosa, mas que cualquier otra que haya visto la verdad. Pero ya regresando al asunto se puso a alegar cosas de que no me picaba, que no si la picaba yo a ella saldría lastimado y justamente en esa parte sonreí un poco travieso por que, me acaba de amenazar en pleno sol, creo que ella no contemplo eso
-Ah si?- pregunte un poco burlón.
-...Por que no creo que sean ''horas'' de ponerse contra un maestro fuego. No te creas, no te lastimaría ni con piquetes.- dije divertido
Era obvio que estaba bromeando, yo jamas lastimaría a Amina ni por que me ofrecieran ser el Señor del Fuego, ella ara mi valía mas que eso, muchísimo mas, los guerreros del sol me enseñaron que una vida humana es invaluable aunque todo el mundo sabe eso, ellos me lo enseñaron e una forma mas filosófica que es demasiado como para poder explicarla.
Con respecto al ''Tzzz'', vale le creo a medias pero le creo de todas formas, no puedo desconfiar de su mirada por mas misteriosa que se vea.

-Ok pues... te creeré por hoy eso de que soy caliente, aunque tenia razón yo. Era un chiste algo sofisticado, no lo había entendido- dije resignandome a la verdad.
Como ya había dicho, esta hora era la mas caliente del día y creo que a Amina se le ponían rojas la mejillas de calor, o quien sabe por que pero en eso si le podía ayudar un poco enfriando la sala, solo vean.
-Tienes calor?... déjame ver que puedo hacer- dije sonriendo con suficiencia.
Me acerque a una ventana y a abrí dejando correr el aire pero era aire que seguía caliente y no abrí la ventana para es nada mas. Junte mis manos un poco pegadas a mi cuerpo con los dedos indice y medio apuntando hacia afuera en ambas manos ambas manos e hice un movimiento circular con mi brazo derecho al momento en que extendía el izquierdo en dirección contraria, asi mi lado derecho apunto a fuera de la ventana y el izquierdo al salón y comencé a respirar profundamente al momento de que el calor del lugar era absorbida por mi mano izquierda y arrojado por el derecho mientras sentía la energía del calor pasar por mi cuerpo. De un momento a otro el salón se había refrescado por la falta de calor y cerré las ventanas para que se mantenga asi. Aunque yo prefiera dejarlo entrar.
-Mejor ahora?- pregunte con una suave sonrisa.

por **Amina Hartwin** Vie Ago 27, 2010 7:03 pm

El calor aumentaba gradualmente, lo sentía aunque luchara por no hacerlo, una sola gota de sudor perlo en mi frente y la retiré con solo un movimiento circular de la mano, la alcé en el aire y me puse a recorrerla por mis dedos, intentando no perder el control, podía manejar una gota ahora pero si intentará hacerlo con un lago, perdería totalmente, simplemente, a estas horas debería estar dormida, mis poderes eran débiles aunque claro que me las apañaba para no perder, generalmente estar rodeada de agua en el día era lo mío, aquí me sentía extraña pero bien, es decir, con quién tenía a un lado no me preocupaba mucho por que tan fuerte era.

Rodé los ojos para poder localizar las fuentes de agua, no podía encontrar muchas, digamos que la sala donde estábamos parecía bastante especial, como si el propio Señor del Fuego hubiera pedido que se mantuviera inmaculada de otros elementos aparte del fuego, el aire estaba pero con el calor que tenía no lo parecía y el agua en él estaba igual de caliente, no podía extraerla por alguna razón, había probado cambiar la temperatura del agua pero ahora no me sentía en total control como para hacerlo, es decir, perdía concentración en el mismo momento que volteaba a ver a los ojos a Balthazar, así que como uno de mis maestros había comenzado a decir antes de que caminara de regreso al Palacio “Nunca pelees si no estas concentrada, Amina”, esta vez parecía tener razón así que valdría la pena hacerle caso, vamos, nada podría pasar si seguía los consejos de alguien, total, algún día en el pasado lo hice.

-Y será un honor ser su alumna príncipe- comenté suprimiendo una risa, nunca lo oía llamarme “princesa” a menos que fuera una broma o se le escapara, pero ahora claramente era una broma pues yo también había contestado igual y después me levanté para dar unos pasos por el lugar, tenía ese andar molesto de una princesa, la ropa que llevaba parecía ondular como el agua, algo realmente lindo cuando estas lejos de ella.

Me acerqué a él un poco más de lo que normalmente lo hacía, solo para molestar, contestando con la mirada en alto, como solía hacer cuando me desafiaban, una total farsa.
-Te escudas en tu sol, pero deja que te duermas y no sabrás que te congelo- comenté con una voz amenazadora en broma, se me hacía tan fácil bromear así, di unos cuantos pasos hacia atrás para no invadir su “burbuja personal”, no me gustaba ser una acosadora, es más, nunca lo había tratado de hacer.- ¿Sabes?, yo no creo que sea capaz de hacerte algo tampoco- comenté con una sonrisa realmente sincera, no era que no fuera lo suficientemente “fuerte” pero mi voluntad no me dejaría defenderme o atacarlo, era como si el estatus que él tenía ahora conmigo era más alto que cualquier pelea, lo valoraba más que como a un simple contrincante, mucho más de lo que pensaba, ahora que me doy cuenta.

-Caliente?... si eso, caliente, claro- acepté mordiéndome un labio, definitivamente tenía que dejar de hablar con Ciara, no servía de nada para mi pensamiento.-Ya después entenderás mis chistes mejor, no creo que no lo hagas algún día- agregué pasándole una mano por los cabellos, una manía que ni siquiera sabía como había adquirido.

-Si, bueno algo, no estoy… acostumbrada- contesté bajando un tanto la mirada ante mi poca resistencia al calor, observé con los ojos entrecerrados la sonrisa que tenía, algo me decía que esto sería digno de ver.

Entreabrí la boca ante lo que había hecho, definitivamente era bueno en lo que hacía, para mí el mejor, pero claro, yo siempre pensaría que él era el mejor, la habitación se refresco de un momento a otro, las ventanas fueron cerradas, sabía que a él seguramente le gustaría más el calor, pero bueno, agradecía lo que hacía por mi, de verdad lo hacía.

-Mucho mejor, muchas gracias- contesté agradeciendo con una mirada tranquila y un suspiro, ahora podía respirar un tanto mejor.

por **Balthazar Morgath** Lun Ago 30, 2010 6:09 pm

Asentí inclinando la cabeza con un gesto de ''realeza'' cuando dijo que seria un honor ser mi alumna, fue gracioso de hecho, nunca hacia esa reverencia, no era mi estilo la verdad, es que yo soy mas seco, diría mi hermano. Note como su vestido ondulaba como olas de mar al caminar, era algo hermoso y mas con el caminar de Amina, toda una princesa de pies a cabeza por lo que veía, nada que ver conmigo que mas bien tenia el caminar de un rudo militar.
Su vestido era hermoso pero según diría mi sastre, que es muuuy gay, le falta el toque ''Hot''. Era un buen tipo y todo pero a veces sentía que me tocaba de mas cuando me tomaba las medidas y me miraba mucho el trasero, ademas de que siempre me sacaba como 5 veces la medida de mis nalgas cuando me iba a hacer un traje por que decía que a lo mejor me habían crecido... me dan escalofríos cuando lo dice, tendrá buen gusto y todo pero es la ultima vez que un amigo de mi madre se mete en mi cuarto sin avisar para tomarme medidas cuando salí del baño.

Y como no escudarme del Sol, es mi fuente de poder, si no lo hago seria estúpido o muy raro. Y hablando de rarezas... casi pongo cara de “WTF” cuando se me acerco tanto, de repente pensé que me besaría o algo pero logre disimular con una sonrisa socarrona y una mirada graciosa. SI no se me apartaba rápido creo que le hubiera dado un beso, no se, ayaya no, ideas mías. Que bueno que se movió a tiempo.
Mas bien que bueno que ella tampoco era capaz de hacerme daño, no se por que pero para mi eso sonó como que le agradaba, mucho, serán ideas de mi manufactura pero se siente, como que bonito que me lo diga y si mis músculos faciales no me engañan sonreí un tanto, como que inspirado o una sonrisa colgate seria la mejor forma de describirlo.

Con el tema del “Tzzz”, pues lo admito, no estoy totalmente convencido de que ser caliente sea el significado total y no creo que le convenga que algún día entienda sus chistes o perderían el chiste, válgase la redundancia. Es que hay bromas como que son solo para un mismo o no son para que alguien los entienda, supongo que eso es lo que pasa con el Tzzz por que como que no me convence del todo pero le creo por alguna razón.
-O...K, soy Caliente, claro- dije con el ceño fruncido por la confusión y a la vez sonriente.
Solo dios sabrá por que a Amina le dio por tocarme el cabello pero me gusto que me acariciara asi, tanto que se me fue la cara de confusión y puse una de observación. La observación era la que le hacia a sus ojos me quede parado ahí, sonriente sin hacer nada mas que esperar a que me soltara pero no quería que lo hiciera, aunque no se lo iba a decir en voz alta, No que pensaría de mi.

Después de que soltase fui a la ventana para sacar el calor de la sala con una técnica muy similar a la de redireccionar Relámpagos, en especial por los movimientos de las manos pero también tiene diferencias como todo. El caso era que ya no hacia calor o no tanto como hace unos minutos por que asi que digan que se enfrió el salón, pues no, simplemente refresco, paso de unos 32° a mas o menos 21°, y eso literalmente hacia que este salón sea el mas frió de todo el País.
Y bueno, ya estando el ambiente mas propicio para Amina, me parecía hora de tratar los temas a los que se supone vinimos a tratar o nuestros padres pensarían que solo anduvimos perdiendo el tiempo o... mejor ni pensarlo.
-Pues creo mejor discutimos a lo que nos mandaron o nos relevaran del cargo- dije con una mueca de culpa.
No me importaba quien se puso a divagar primero por que sinceramente me la estoy pasando bien con Amina pero pues las necesidades del pueblo y las relaciones internacionales son primero antes que las personales, ademas me gustaba tener la confianza de mi padre, pudo haber mandado a mi hermano o a un general pero me eligió a mi, a lo mejor fue una táctica para comprarme o para que vea que el no ve diferencia entre Nath y yo, de cualquier modo que haya sido me alegro que me confié un parte del futuro de nuestra Nación.

Si, le tenia un grana afecto a mi país asi como seguramente Amina le tenia uno al suyo y es que con lo que viene, las amenazas de los paladines y todo lo que acontecerá los aliados teníamos que estar mas unidos que nunca. Aunque todos sabemos que esta guerra lleva siglos, no se habían preocupado tanto como ahora, posiblemente por que las respuestas de los Paladines no eran tan fuertes desde que acabaron con el ciclo del avatar o mas bien con sus poderes, y ahora que llevamos tanto tiempo sin un protector y ellos se han fortalecido en numero y armas, deben estar planeando la extinción de los maestros. Pero si no lo han podio hacer antes menos ahora que las 4 naciones son casi una misma.
Aunque según mi padre eso es lo que le preocupa, si pretenden acabaron con nosotros la magnitud de su ataque sera enorme... muy enorme.

por **Amina Hartwin** Lun Ago 30, 2010 9:33 pm

Coloqué una mano tapando mi boca delicadamente pues no quería reir ante su pose, lo conocía bastante bien como para saber que no usaba eso nunca, es más, seguramente todos se reverenciaban ante él en este lugar, era como [molestamente] a mi me saludaban a cada paso que daba por el Polo, todos parecían querer que los conociera y me hacían reverencias y sonrisas que nunca sabía si eran reales, yo en esos casos tenía que ser fuerte para no salir huyendo, de verdad odiaba eso, solo era otra chica con un poco más que manejar y saber elegir a mis amigos por que era de vital importancia estar segura, pfff como si no me supiera defender.

Cuando al fin pude suprimir la risa sonreí bajando las manos para jugar con un hilo que había encontrado en la tela, lo movía entre los dedos para distraerme un poco y no ponerme a pensar en otros...asuntos, ahh vamos, era tan difícil teniendo a Balthazar cerca poder concentrarme en lo que debía, ahora intentaba saber qué era lo que tenía que contarle y simplemente no podía encontrar las palabras, era como buscar una perla en un pantano y creanme que sabía lo que era eso, a uno de mis amigos se le había ocurrido "accidentalmente" quitarme uno de mis pendientes y lanzarlo al pantano solo para que yo "practicara", lamento decirles como acabo esa persona, digamos que una armadura de lodo es difícil de llevar durante todo un viaje.

Bajé la mirada durante unos segundos al ver la sonrisa con la que había recibido mi gran intento amenazador, al menos no se dejaba intimidar, un punto extra para él, era parecido a mi en ese punto, sonreí acomodando un mechón de mi cabello que había quedado fuera para poder ver mejor a mi alrededor, no quería ir por ahí caminando por el lugar pues se vería mal de mi parte, y definitivamente no quería quedar mal, tenía cierta reputación que mantener, fuera de que no era tan "normal" como otras princesas, aun tenía que cuidar mis modales y lo que decía, sobre todo lo que decía, ahhh que loco era todo esto, si pero no, simplemente no sabía como seguía siendo yo.

Me mordí el labio cuando comento lo del "resbalón" que yo había dado con el Tzzz, esas cosas no debían salir a la luz y lo sabía, no sería divertido si no era un chiste interno, ahh pero bueno, no importaba -No pongas esa cara, que me dan ganas de picarte para que la quites- comenté simplemente, se me hacía raro verlo con esa expresión, vamos, no era normal ese tipo de expresión y yo lo sabía bien.

Intenté sinceramente no bajar la mirada cuando se alejo de mi para ir hacia la ventana, no sabía por que me había sentido mal ¡Vamos, ni que fuera que!, ahh estaba paranoica hoy, sabía que él no se enojaría por un gesto como ese, ¿O sí?, ya ya, paranoias fuera. Cuando pude controlar mi propia cabeza alcé la vista para ver lo que hacía, esa técnica la había visto en algún lado, y no, no era en los Relámpagos, tenía unos movimientos fluidos y suaves como los que yo utilizaba, ahh claro, ya entendía, solo estaba moviendo algo, sentí la temperatura descender un poco más, definitivamente ahora me sentía en casa, por primera vez en otro nación estaba tranquila.

Inhalé el aire frió para soltar después un suspiro poco sonoro, entrelacé mis manos frente a mí para poder mantenerme quieta, al menos eso era lo que solía hacer en estos casos.

-Tienes razón, y sé que ni tu ni yo queremos eso así que, comencemos- acepté con una sonrisa dándole a entender que por mí estaba bien, no importaba de qué habláramos.

Me adelanté para sentarme en el banco del piano, de espaldas a las teclas para poder hablar mejor, podía sentir todo eso que mi madre había dicho que era importante, en este tipo de "negocios" no podía guardarme nada por simple orgullo, las cosas debían arreglarse de un modo u otro.-Bueno, lo primero que deben de saber es que a la Tribu Agua del norte han estado llegando reportes de gente, especialmente maestros, que se pierden en el témpano tras la ciudad, lo que pasa es que nosotros conocemos de memoria todo el Polo o al menos sabemos ubicarnos, es imposible que nos perdamos, aunque también se ha dicho que son viajeros, la razón por la que vine es por qué hace unos días se dijo que un Maestro Fuego, uno de sus soldados, se "perdió" no sabemos si tenía algo importante que decir o qué pero mi Madre no quería que se dijera que nosotros habíamos hecho algo, cosas extrañas han estado sucediendo aunque todos pensamos que son los Paladines, no podemos hacer nada pues no han entrado directamente a la ciudad, solo al Desierto de Hielo- conté con una voz clara, la misma que me había dado un lugar en el consejo, no era solo la representante de mi madre por ser, bueno yo, sino por qué según todos, conseguía que me pusieran atención, o eso había dicho alguien. El pensar en las personas que habían desaparecido me llevaba a pensar en las responsabilidades que nosotros teníamos con el pueblo, les debíamos seguridad y yo no podía permitir que mi país fuera desquebrajandose así como así, aunque pocos lo creyeran, si mi hogar caía, yo también me dividiría, no podía permitirlo y no lo haría si podía detenerlo.

por **Balthazar Morgath** Lun Ago 30, 2010 11:06 pm

Le note el gesto de taparse la boca para disimular la risa, era obvio que se reía de mi pose de disque príncipe, si hasta me sentí raro la verdad pero fue gracioso, además la hice reír y según eso es bueno con las mujeres. CHA!!! otra vez la burra al trigo, como me gusta darle vueltas al asunto, esta visita era casi como de negocios, si fuéramos comerciantes o empresarios. El hecho es que no me la podía sacar de la cabeza asi nomas, como que se me hizo una, no se, visión de ella en mi cabeza por verla asi tan de repente después de tantos años, bueno no tantos como para decir que eran ''muchos'', solo no nos veíamos desde las reuniones pasadas que la ultima fue hace 4 años y la que seguía ya venia y esta vez tocaba en la Nación del fuego y que seria precisamente en este palacio, hace 8 años le toco a la Tribu Norte del Agua, después fue turno de mi ciudad natal Néjen, ahora vamos con Senghi Lao y después le tocara al Monasterio Este de los Nómadas Aire. Se sigue el mismo ciclo que el del avatar, agua, tierra, fuego y aire.
Simple y sencillo, y cuando le tocaba a la Nación siguiente lo visitábamos durante su estación o sea que cuando el verano llegue se hará la reunión aquí, nada de tener que sortear la nueva nación, mis polainas. Lo bueno era que vería a Amina de nuevo y a Ciara pero ella, bueno ella creo traería a su amigo, como era su nombre..., no me importa de hecho pero no se me olvida que ese imbécil casi me quema, aun tengo la marca en mi brazo.

Pasando de las amenazas y las ropas, seré honesto diciendo que esa respuesta no me la esperaba de ella. Me picaría? eso si era algo digno de oírse por lo que si quite mi expresión pero no por que ella me lo dijera si no que me dio gracia escucharla asi y no pude evitar reírme levemente pero quise esconderlo y solo logre reír con la garganta, vaya que me raspe con esa risa, bueno, intento de risa ahogada. No, que pena me di la verdad, me tuve que tapar la boca rápido casi casi cachetandome yo solo la boca. Juro que eso nunca me había pasado, no en publico al menos y menos en lo que se supone es una reunión seria.
-Ahp... perdón, no se de donde salio eso- dije con la boca entre mis manos.
-Es que te imagine picándome- dije aun con la misma pose.
Donde hay un maestro tierra que haga que el piso te trague cuando lo necesitas, maldición que risa mas fea hice y todo por intentar no reír en vez de hacerlo bien. Según dicen tengo una risa bonita, bueno solo lo dice mi madre que es la única otra persona que me ha visto sonreír y eso por que era bebe.
De cualquier forma recobre la compostura con las mejillas rojas por la pena, nada pero que humillarse solo frente a la chica que te gusta, no?, soy patético en esto de las relaciones.

Eso me recuerda que tuve 2 Agni Kais por 2 chicas diferentes en 2 ocasiones diferentes y que al final prefirieron a los golpeados de sus ''novios''. Si, me fue mal, pensaron que era un tipo agresivo pero fue culpa de esas zorras que me coquetearon por que querían sacarme dinero y esas cosas, yo de idiota les creí. Pero mas idiotas sus novios al retarme a un Agni Kai, el segundo fue mas estúpido que el primero, me ataco por la espalda cuando al muy sangano le perdone su derrota. Se hubiera quedado asi y no me hubiera hecho responderle, ahora tengo una cicatriz en la espalda y el... bueno no me gusta hablar tan mal de los muertos, nah que dijeron, pero si lo deje muy mal herido. Y eso me sirvió de lección para no dejar tan ''libre'' a mis enemigos. Recuerdo que mis maestros, los 2 me decían que me cerciorara de que mi oponente ya estaba fuera de combate pero es que el Agni Kai se supone que un encuentro de honor, es de cobardes atacar por la espalda. Aunque me siento mal por responder como lo hice, pude haberlo simplemente quemado como el a mi pero en esos tiempos yo era otro, no tan diferente de el Balthazar que ven ahora pero definitivamente era otro, ahora tengo mas serenidad.

Quitándome las ideas de la cabeza, Amina se notaba mas a gusto con el cambio de temperatura. No era tan malo de hecho pero el clima cálido es lo mio, mi fuego control era mejor en climas cálidos. Supongo que mi mejor día en la vida sera cuando este en u desierto durante el Cometa Sozin a las 12:00 pm en verano, ojala viva para ese día.
Negué con la cabeza por su comentario, no quería que mis papas pensaran que no soy bueno para esto. Tome una silla de las que estaba en el salón y me senté frente a Amina, poniéndole atención a su caso. Esta reunión era muy informal, no había mesas ni estábamos en una sala importante, era solo la sala del piano pero los formalismos no van aquí, no quería relacionarme con Amina solo con cosas formales, para conocer a una persona había que quitarse etiquetas y todo para ver quien estaba debajo del disfraz.

Continuando con la reunión, asi que se trataba de desapariciones también. Lleve mi mano izquierda a mi barbilla y la frote suavemente mientras analizaba lo que me decía, tenia una buena voz de mando a decir verdad. Sin embargo lo de las desapariciones eran preocupantes, el reino tierra también nos informo de algo como eso y el punto es que ya no son simples extravíos de pueblo, era una cantidad de gente muy alarmante y siempre eran maestros, jamas un humano. Eso tenia que ser por obra de los paladines, tramaban algo pero era imposible saber que sin mas información, todo lo que sabemos es son capaces de suprimir los controles elementales. Thomas dijo a todos que en un sueño, el avatar Abraham, el que se supone murió en el estado Avatar, no fue asesinado sino que le suprimieron los poderes, por eso es que la reencarnación del Avatar aun continua.
Esa fue una información muy importante por que nos levanto la esperanza aun mas.
-Así que también hay desapariciones en las Tribus Agua- dije con un tono preocupado.
De pronto perdí mi mirada en el suelo por uno segundos.
-En las islas de la Nación del fuego han habido reportes de extrañas actividades y muchas desapariciones también- dije elevando mi vista a Amina.
-No me cabe duda de que hay Paladines mas cerca de nosotros de lo que pensamos, esto habrá que comentarlo bien en la próxima asamblea este verano. Nuestras ciudades ya no son tan seguras-
Era muy importante que Amina y yo pensemos ahora mismo una método para poder calcular las desapariciones y poder prevenir las siguientes o pensar en un método mas seguro de transportarnos entre las 4 naciones o los próximos serian los altos mandatarios. Hace un mes 2 Capitanes se extraviaron y un Mayor se perdió poco después.

por **Amina Hartwin** Mar Ago 31, 2010 11:04 pm

No me molestaba en absoluto la pose que intentaba hacer pero era diferente a las otras que había visto, es decir, en diferentes naciones se hacían diferentes reverencias, generalmente en la Tribu Agua inclinaban la cabeza y ponían la mano sobre el corazón, otros eran un poco más de la "realeza" como era el caso de la Nación del Fuego, si bien sabía aquí ambos hacían reverencias pero con otro estilo, aunque nunca lo había practicado en realidad, eran pocas las veces que lo necesitaba pues, tristemente, no podía dejar la Tribu por mucho tiempo y menos ahora.

Las cosas de la Tribu quizá no fueran asunto totalmente mío pero se me permitía de vez en cuando involucrarme en algunos asuntos importantes, la próxima reunión se acercaba, hace 8 años había sido en nuestro palacio, ahora sería aquí en Senghi Lao pero aun faltaban algunos meses, quizá no tantos como al principio pero era seguro que algo faltaba, debía aceptar que cada 4 años desde que se me permitía estar en el consejo, esperaba con ansias la próxima asamblea, era como un rictus que siempre seguía y ahora tenía razones de sobra para esperarlo, era seguro que él estaría ahí, ohh vamos, por favor Amina, tienes que dejar de pensar en eso, son negocios, eso y solamente.

Alcé una ceja cuando intento tapar su risa, me hubiera gustado en realidad oírlo reir de verdad, ahora que reparaba en eso nunca lo había escuchado, si bien yo tenía una manía por tapar mi risa, en él no me gustaba, coloqué una sonrisa en mi rostro casi sin pensarlo, era todo tan natural.-Yo te digo de dónde salió, de tu boca, y si no hubieras intentado taparla, me habría encantado oirte- le dije manteniendo mi sonrisa cordial y cálida, una que solo pocas veces podía soportar.-No te preocupes, si hubiera imaginado algo así aun estaría riendo- bromeé encogiendome de hombros, no podía pensar en mi en esa situación, me daba risa de solo intentarlo, como sea, no me había dado cuenta pero sus mejillas parecían un poco más rojas de lo normal, no saqué a relucir ese detalle, solo me sentí mejor, ahh vamos, pocas veces tenías el privilegio de ver a Balthazar Morgarth en ese estado y algo me decía que él no querría que se repitiera.

Poco a poco el color se fue desvaneciendo y parecía más a gusto con sí mismo en el clima que había ahora, al menos no le molestaba tanto cambiar por mí, no, no por mí solo por que estuviera mejor, no era para tanto, solo tenía que recordar eso y no estaría perdida luego. En cuánto terminé de hablar mordí mi labio inferior, de verdad estaba preocupada, primero maestros y luego ¿Quién seguía?, no quería estar en peligro pero me odiaría a mi misma si pusiera a mi bueno al pueblo en peligro y ahora si nosotros no enfrentábamos el problema les daríamos a los Paladines justo lo que quieren, una división en nuestras filas y a nadie le convenía algo así.

La conveniencia era algo que todas las naciones teníamos pero todos intentábamos ajustarnos a los demás para permanecer en paz, sabíamos de lo que los demás eran capaces y no estábamos dispuestos a desafiarlos, una guerra entre nosotros no seria de ayuda para nadie.-¿Aquí también sucede?- pregunté algo extrañada, vale, esto ya no era normal.-Nosotros pensábamos que estaban actuando alejados pero al parecer son tan cínicos que tienen la indecencia de ir por todo el mundo, no he hablado con los otros representantes pero que este pasando esto también en la Nación del Fuego no es un gran signo, debemos elevar la vigilancia.- comenté sin más, eso era lo que pensaba y había sido bastante clara para no decirlo de mala manera.-Aunque no estoy segura sobre que tanto nos podamos defender contra los Paladines especializados, ellos van sobre un maestro y seguramente van a ganar, si hubiera algunos soldados diferentes mezclados en las filas de otras naciones, creo que podríamos defendernos mejor pues sería un tanto sorpresivo, pero no se que les parezca a los demás, la Asamblea de este verano será interesante- agregué con una sonrisa, eso no se lo había comentado realmente a mi mamá bueno, quizá una parte pero en ese momento algo había sucedido aunque ella me había dicho que tenía su aprobación.

por **Balthazar Morgath** Miér Sep 01, 2010 5:19 pm

Trague algo de saliva y puse una sonrisa casi forzada por el nervio de haber reído de manera tan... no quiero ni describirlo. Tome algo de aire por la nariz y lo exhale por la boca para relajarme, eso siempre me ayudaba, la base del fuego control es la respiración y tanto así soy experto en ese tema que puedo respirar fuego real y muy potente por la boca o nariz, ademas de que hacer eso me daba serenidad, o fuerza dependiendo del caso, en este caso recobré mi compostura. No quería ofender a nadie, mucho menos a Amina pero es que casi nadie me ve con la mueca de sonrisa en la cara a, al menos no una risa de alegría espontánea, es que sentía que no era lo mío ser tan amigable, vamos, que mi puesto exige ser muy firme y analítico.
-Es en serio?... es que, no se, no acostumbro reír mucho así que no se si mi risa te guste.- dije rascandome la nuca.
Sonreí de lado mas relajado cuando Amina dijo que ella posiblemente estaría igual que yo si se hubiera imaginado lo que yo, en lo particular su sonrisa me gusta, que digo su sonrisa, TODA ella me gusta pero... como me jodo yo solo, ahora no es el momento de pensar en relaciones cuando estamos como estamos con la guerra.

SI, y esta guerra aun no mostraba lo pero de si misma. El golpe mas doloroso fue el que le dieron al Avatar, no se como lograron quitarle su control de los elementos pero afortunadamente no le quitaron su ciclo de reencarnación o no habría esperanza para estos tiempos, lo cual me recuerda que literalmente la esperanza es lo ultimo que muere, el avatar lleva casi mil años sin poderes por lo que todos sabemos y van ya casi 800 intentos de devolverle su poder pero no hay éxito, no se como es posible que no lo logremos aun, es como si el Avatar no quisiera regresar o... es que aun no debe?. Yo creo que todo pasa por alguna razón pero me gustaría saber cual es la razón por la que el avatar aun no regresa, mi esperanza aun no ha muerto, eso se nota en mis llamas verdes que desde que me presente ante Ran y Shao mi fuego adquirió ese color, vi que la esperanza del mundo no ha caído, tuve visiones en el tornado de fuego que me revelaron el sentido de mi existencia y se que seré parte de esta guerra pero aun no se cual es mi papel que deberé tomar para ayudar al Avatar, sin embargo, como ya lo dije ese es mi motivo, se que deberé de ayudarlo pero no se de que forma. Todos deberemos de hacerlo, solo me hubiera gustado saber que pasara cuando ganemos definitivamente esta guerra de casi 3 mil años. Eso es demasiado tiempo.

Sip, aquí también había desapariciones como pregunto Amina. Asentí con la cabeza expresando un disgusto por la incapacidad que teníamos ante estos atentados, era demasiado extraño lo que nos ocurría pero estoy seguro de que esto ya era a escala global. Y por lo que sabemos los Paladines pretendes eliminar nuestros controles con los elementos pero no se como harán eso o si solo sea especulaciones de nuestros informantes, pero algo es seguro, le paso al Avatar y a como ocurrieron las cosas no se si el Avatar decidió no reencarnar adecuadamente hasta que sea necesario, o si en verdad no puede.
Lo que dijo Amina era una excelente idea, mezclar a las 4 Naciones mas de lo que ya están, podría ser una especie de defensa sorpresa para los Paladines, es bien sabido que solo envían Especialistas en cierto elemento a cierta Nación, como aquí, que mandaron hace mucho tiempo un batallo de especialistas en fuego y hubo muchas bajas mayormente nuestras, los únicos paladines muertos fueron no mas de 15 de un total de 45 y 50 de 120 Maestros fuego murieron, sus habilidades con la defensa contra los elementos es impresionante, se dice que un Paladín Especialista puede contra 2 maestros y un aprendiz al mismo tiempo y salir victorioso, tuve suerte de que el paladín que me ataco cuando tenia 17 no fuera un especialista totalmente experimentado. Había sido una pelea de 1 contra 1 y según las estadísticas yo ya había perdido desde que lo vi de frente.
-Me parece excelente, sus ejércitos saben que estamos ligeramente mezclados, pero no tanto como para mandar 2 tipos de especialistas a cada nación y si lo hicieran no podrán contra 4 tipos de maestros- dije sonriendo por la idea pero me quede un momento en un trance.
Pensé en lo que dije y encontré una problema significativo.
-Pero creo que hay un problema, Las fuentes de control. Si los maestros agua viven en otro lugar fuera del polo que no sea el pantano están prácticamente desprotegidos y ni que decir de los Maestros Tierra, no hay fuente de control para ellos en el polo- Troné los labios con disgusto por ese percance.
No podíamos solo tener 2 o 3 tipos de Maestros en cada nación, necesitábamos la unión de los 4, como el Avatar.
-Mi única opción es que llevemos grandes cantidades de tierra al polo y agua al Reino tierra. pero los Paladines podrían notar esa extraña actividad y preverla. Alguna idea?- pregunte esperando recobrar el animo, era una excelente idea pero tenia una importante falla. Los Maestros Gua y Tierra no podía hacer nada sin sus Fuentes de control, el Aire estaba donde sea y nosotros tenemos como fuente el sol, lo que nos deja hacer fuego donde sea.

por **Amina Hartwin** Jue Sep 02, 2010 8:34 pm

Fruncí el ceño algo confundida ante su expresión, al parecer estaba nervioso, bueno en cierta manera yo también lo estaría si me sintiera fuera de lugar, podía ver que así se sentía pues su sola respiración había estado un poco irregular, oí un solo respiro y después vi su expresión cambiar a una mas...él mismo, al menos eso parecía, se veía mucho más en control, ahh bueno quizá era mi percepción, él siempre me había parecido así, era una de las razones por las cuales..¿Por las cuáles qué? ahh Dios mío, Amina deja eso, ya, ya olvídalo, pasado, pasado. Definitivamente tenía algo que aprenderle, al menos sus ideas no se reflejaban en su expresión, si no me equivocaba la mía ahora debería tener una sonrisa tonta y una mirada perdida, ahh que mal estaba.

-Pues, de hecho no creo que haya una risa que no me guste, en especial si es tu caso, quizá hasta me contagies, tu no te preocupes por eso, no estoy para juzgar- contesté esbozando una sonrisa más... linda, las sonrisas tontas nunca me habían gustado y era algo con lo que tenía que lidiar cada que pensaba en otras cosas, pero ahora tenía que concentrarme y pensar en otras cosas, la guerra no era cosa fácil y justo en eso nos teníamos que concentrar.

El asunto de la guerra me parecía un tanto molesto, me preocupaba de sobremanera todo lo que estaba sucediendo, estábamos todas las naciones juntas contra un enemigo en común, pero aun así seguíamos cayendo y los Paladines mejoraban, sus tecnologías eran algo casi irreal, no podía entender como algo así, tan...nuevo, pudiera causar tanta destrucción, si el Avatar estuviera aquí... es verdad, si el Avatar estuviera aquí, esto nunca habría pasado, las cosas hubieran tomado otro rumbo, podríamos ser prácticamente libres de hacer lo que quisiéramos sin el temor de que alguien nos fuera a capturar, bueno, al menos ese era mi temor, otra gente ni siquiera imaginaba que esto estaba pasando, no podíamos dar sospechas y mucho menos dejarle saber a los Paladines que estábamos preocupados, lo usarían en nuestra contra y eso no dejaría nada bueno, todos los que estábamos conscientes del problema lo sabíamos y teníamos que detenerlo, no solo por nosotros, por el mundo. El mundo necesita de alguien que lo salve, y al menos yo, estaba dispuesta a pagar el precio que fuera por ayudar, si estaba en mis manos lo haría, para mí era mejor el bienestar de todos al mío propio.

Alcé la mirada solo para encontrar un seco asentimiento, las desapariciones eran globales y estaban en ascenso, no podía creer que esto estuviera pasando, no podemos solo perder maestros por que sí, había que encontrar una manera de pelear contra lo que pasaba pero siendo discretos pues si alarmábamos a todos, las cosas probablemente saldrían mal, me mordí el labio inconscientemente intentando no pensar en la idea que rondaba mi mente, alguien me había hablado de la Resistencia, personalmente nunca había tenido el gusto de hablar con alguno de ellos, vivir en el Polo generalmente te mantiene un poco alejada de la sociedad, no tanto pero si lo bastante para no saber las nuevas noticias en segundos, claro, había formas pero a decir verdad, no era fanática de eso, prefería hablar frente a frente, así me enteraba mejor, aparte de que me divertía un poco más que leyendo, aunque fuera una de mis pasiones, la lectura no siempre compensaba lo que sucedía fuera del libro y para ser claros, fuera del libro había un desastre que había que arreglar, el último ataque al Polo Norte no dejo tantas bajas como esperábamos, los Paladines cometieron el error de intentar sorprendernos en el ocaso, para cuando iniciaron el ataque, la Luna estaba en el cielo y no fue tan fácil pero al final las bajas fueron equitativas, aunque los Paladines esa vez parecían listos para otra cosa, definitivamente no iban sobre los civiles, querían encontrar a los maestros, hay precedentes desde entonces.

Salí del mundo en el que había estado inmersa hace un segundo para ponerle atención a lo que me iba a decir.-En eso tienes razón, estamos un poco atados de manos en ese tema, pero si el Avatar alguna vez pudo arreglarlo, espero que nosotros también- comenté intentando no dejar mi idea caer solamente por ese percance, si lo dejara así nunca haría nada bien, había que intentar y volver a intentar.

Me quedé pensativa unos instantes, intentando resolver el problema, quizá no fuera buena idea pero, había que tratar.
-Yo pienso que eso llamaría mucho la atención, pero en cambio, si los Maestros Agua nos preparamos más, se puede extraer el agua de otros lugares, las nubes tienen agua, quizá podríamos pedirle ayuda a un Maestro en el Pantano para que nos ayude a controlar el agua dentro de las plantas y así no estaríamos tan desprotegidos y en el caso de la Tierra, bueno, el carbón viene del suelo y eso no sería extraño que lo movieran, todo país necesita un combustible, bueno, es una idea pero la verdad, si tienes algo mejor o crees que puedas pensar en alguna solución, soy todo oídos- contesté sinceramente pasándome un mechón de cabello tras la oreja en un ademán distraído.